De festejos y balances

Llegan las fiestas, momento especial del año, y con ellas comienzan a movilizarse muchas más cosas de lo que parece (más allá de si uno festeja o no la Navidad).

Las Fiestas nos traen el fin de un ciclo, de un año que otra vez, “se pasó volando”. Nos recuerdan que el tiempo no espera nuestros tiempos ni nuestros procesos. Él, implacable, sigue su curso.

El fin de año y el principio del siguiente es el momento para muchas y muchos, de hacer balance, de mirar atrás, a los meses pasados. Ver cuáles son esas metas que hemos alcanzado y cuáles las que hemos olvidado. Recordamos aquello que pensamos que íbamos a lograr, aquello que pensamos que íbamos a cambiar y, a veces, también aquello que nos parecía impensable y finalmente sucedió. Es el momento también de los propósitos para el nuevo año, de esas cosas que queremos alcanzar y que en este momento, con renovada ilusión, enumeramos. Como si el nuevo año nos permitiera empezar de cero, poner la cuenta en blanco.

Te invito a que hoy hagas tu balance del año, ¿Por qué? Porque está bueno hacerlo. Porque nos orienta en donde estamos, en todo eso que hicimos, y que a veces paso imperceptible ante nosotros, y porque también nos permite visualizar el año que nos espera y de que manera esperamos y queremos recibirlo.

Te propongo que enumeres 10 pequeños logros de este año, no los grandes, que también los ha habido, sino los pequeños y cotidianos, y si crees que esto te resulta muy difícil te doy algunas preguntas que podes ir respondiendo para ayudarte:

1. ¿Cuál fue uno de los momentos que más disfrutaste en el 2018?

2. ¿De qué estás más agradecido en el 2018?

3. ¿Cuál fue tu logro más importante en este año?

4. ¿Algo nuevo que hayas aprendido?

5. ¿Qué te alegras de dejar atrás con el año que termina?

6. ¿Cuál es uno de tus proyectos o metas más importantes para el 2019?

Nada más valioso que saber lo que sabemos, que tener clara nuestra propia producción de saber. Después podemos decidir si queremos compartirlo o si queremos guardarlo, pero seguro nos servirá para tomar mejores decisiones.

Y para estas Fiestas te deseo que puedas saber lo que te gustaría hacer. A veces se puede; a veces, no. Pero saberlo siempre nos acerca más a la posibilidad de concretarlo.

¡Te espero en este nuevo año que empieza para seguir con más!

2019... Allá Vamos!